jueves, 14 de agosto de 2008

Sueño

¡Qué cosas dijo!
Mi cuerpo se encendió.
Viendo brotar su amor,
mis ojos, dichosos,
se empañaron.

Anoche lo soñé.
Desató mi vestido.
Precipitadamente
me cubrí con las manos.
Pero, ¿quién puede esconder colinas
con unos cuantos pétalos?


Zaid

Jueves con sabor a lunes

Lunes, y no hay señales de nada, tu cordialidad ya no es nada para mí. Hubiera, hubiera hubiera…no hubiera dicho nada, así se hubieran hubieran quedado las cosas. Y yo que me propuse no lastimarte, jajaja. Así se hubieran hubieran hubieran quedado las cosas.

Tú te lo pierdes

Allí estás, aquí, allá, conmigo, en mí.
El silencio ha sido cruel, tú no confías, yo tampoco.
¿Cuándo se abrirán las puertas?
¿Cuándo dejarás salir las tempestades, la desmesura?
El día que lo hagas, tal vez te veas miserable.
Pero me tendrás a tu lado para siempre.

Desahogos

Estoy bien, eso de manejar borracho es hereditario, pero estoy bien y en casita. Hogar dulce hogar.
Sin mucho que decir, sólo que duró 3 largos días, lapsos de una amor extraño, un amor que despierta, que me acaparó para decirme una verdad, ¿una verdad? El amor nunca se fue, allí sigue esperando, el amor no es este nuevo, ni aquel que está a mi lado, tampoco aquel que no sabe de mi amor, mi amor, mi amor eres y seguirás siendo tú.

martes, 27 de mayo de 2008

Zaideando

Temblor

Los árboles se volvieron fresnos
y aquello umbrío verdinegro
mi sinceridad.
¿Tembló? ¿Temblé?
¿Fue un abismo de dalias o un abismo
sobre el cual la ciudad se mecía en sus chinampas?
¡Y todo por creer en el fin del mundo!
La gratitud se me subió a la cabeza.
Estaba tan borracho cuando el ángel llegó
que lo eché a perder todo
porque yo quería ver.

jueves, 17 de abril de 2008

Oración al señor de la duda

Más que fe, dame un equipaje de dudas.
Ellas son mi puente, mi afluente, mi oleaje.
Venga a nos el Reino de lo Incierto.
Mantén en vilo mis verdades,
concebidas, muertas y sepultadas 
en los telares del olvido. Llévame 
por las arenas movedizas,
dame a comer el pan de la derrota,
a beber el agua del silencio,
no hay timos ni trucajes:
estoy herido y soy mi camillero.
Sean las certezas palacios de nieve
a los que alguien asedia con el fuego.
Señor  de la duda, si existieras,
escucha la oración del descreído.

J.M. Roca

jueves, 21 de febrero de 2008

Desahogos 1era parte

  Algo que de verdad me molesta de las iglesias evangélicas neopentecostales (no todas, claro) es que muchas veces no se respeta la vida íntima de sus congregantes, ¿por qué tiene toda la iglesia que enterarse de que fulanita se embarazó de perenganito, de que el pastor engañó a su mujer con la que recogía las ofrendas, que a Pancrasio lo vieron salir de un hotel con su novia?Bueno, mi enfado no es porque la gente se entere de la vida personal de otra gente, sino del modus operandi de la iglesia frente a estas situaciones, sólo lo hacen del dominio público, pero hasta allí. Después de tantos siglos se sigue quemando gente. 

 Qué curioso, muchos miembros de la iglesia evangélica se opusieron rotundamente a la despenalización del aborto, y se seguirán oponiendo, pero mucha de esa gente es la misma que cuando Petrita se embarazó antes de casarse la retiraron de cualquier labor que estuviera ejerciendo en la congregación,  y además la señalaron. ¿Quién entiende entonces? Ah, bueno, este caso tiene sus excepciones, si es la hija del pastor a la que le ocurrió esto, pues no hay problema, pero si le pasó a Petrita, entonces la cosa cambia. Porque en el reino de los cielos Petrita podrá ser igual a la hija del pastor, pero en la iglesia no, en la iglesia claro que hay jerarquías.

  Hoy hablé de Petrita, otro día hablaré de los que por cantar dos o tres coritos los domingos en la iglesia ya quieren dar conferencia de prensa y toda la cosa. Ja ja ja, lo siento, tenía que escribir algo.

domingo, 27 de enero de 2008

Creo que mejor no

Y decido que sí quiero recorrer esos campos que no he visto, y hacer las cosas que nunca he hecho, bañarme en ríos hasta ahora desconocidos y ... encontarle.